Hace años no escribía una entrada llorando.
Pero es que el olvido duele tanto. Calamaro, canta como todo un bohemio. Y yo, lo escucho cantar como todo un perdedor.
Sé que no he perdido nada. Pero siento como si lo hubiera perdido todo. Hasta el alma.
Justo donde duele.
Directo.
En el corazón.
Todo está conectado, y yo estoy condenada.
Cuando ya no te queda más que olvidar, solo tienes que continuar.
Así no haya camino.Tengo que avanzar.
Así no tenga ánimos. Tengo que cantar.
Así no tenga alma. Tengo que revivir.
Lo siento Mily. Siento torturarte tanto.
Pronto todo será olvido. Y no habrá más que buenos tiempos.